El Instituto Nacional de Ciencias de la Salud Ambiental de EEUU, ha publicado tras realizar un estudio en EEUU, que la gran mayoría de las mujeres embarazadas tienen en su cuerpo sustancias químicas que pueden afectar de forma negativa en el feto.
La investigación se basa en los datos recogidos sobre 268 mujeres y determina que el 99% de las mujeres embarazadas albergan en su cuerpo numerosos contaminantes como el mercurio y metales pesados. Estas sustancias pueden atravesar la placenta y dañar al feto.
Las sustancias químicas encontradas están presentes en la sangre y orina de las embarazadas estudiadas, y se asocian a enfermedades que las mujeres padecen. Por ejemplo, la presencia de mercurio en el organismo se relaciona con problemas neurológicos.
Tracey Woodruff, director de la investigación, aconseja a las embarazadas que tomen medidas especiales como consumir productos orgánicos, mantener el hogar libre de polvo, lavarse bien las manaos antes de comer y cusar productos de aseo personal que contengan el menor número de componentes químicos; con el fin de reducir al máximo la presencia de estas sustancias. Además, deben seguir las recomendaciones habituales en caso de embarazdo como hacer una dieta saludable, no fumar, no beber alcohol, etc.
Por otro lado, el estudio revela que las sustancias químicas peligrosas para el feto encontradas en las mujeres embarazadas también se encuentran en los cuerpos de las mujeres no embarazadas. La diferencia radica en el riesgo que los contaminantes suponen para el correcto desarrollo del feto.
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